Una ensalada es, hoy por hoy, un plato sencillo y saludable que permite todas las combinaciones posibles. Si bien es cierto que sacia y llena de salud, hay que tener bien claro qué ingredientes se han de incorporar en ella y cuáles no. Las siguientes líneas te ayudarán a conocer cómo se prepara una ensalada saludable.
1. Añade en su mayoría alimentos frescos de origen vegetal. La ensalada básica incorpora vegetales de hoja verde como la lechuga y otros alimentos que, con su aporte de agua, fibra, vitaminas, minerales y fitonutrientes vegetales, le otorgan las características saludables que necesita.
2. Intenta que todos sus ingredientes sean alimentos crudos.
3. Olvídate de añadir salsas que manipulen el sabor de sus ingredientes. Intensifica sabores pero no los ocultes.
4. Hablando de aliños, ¡ni se te ocurra pasarte con la sal! Muy posiblemente sus ingredientes ya la incluyen. Puedes añadir tranquilamente zumo de limón, vinagre de manzana, aceite de olvida virgen extra…
5. Si le añades pollo, jamás empanado. Solo conseguirás sumar calorías.
6. Evita que tenga más de cinco ingredientes (seis si incluyes el aliño), y es que la ensalada perfecta te permite degustar cada uno de ellos con el toque especial de las buenas combinaciones. Si incluyes demasiados perderás sabor además de dificultar la digestión y aumentar el número de calorías.
7. Incluye cereales como la quinoa, el cuscús, el maíz o el amaranto. En puñados pequeños o cucharaditas, ¡no abuses!
8. Por último, una ensalada saludable combina alimentos que componen una mezcla equilibrada de carbohidratos, proteínas, grasas, fibra, vitaminas y minerales.
Concluyo dejándote dos combinaciones de ingredientes que constituyen ensaladas saludables, una con acción diurética y laxante para evitar la retención de fluidos y facilitar las visitas al baño; y otra amiga del hígado que te puede ayudar a perder peso y eliminar grasas fácilmente.
a) Como la de la imagen superior, con espárragos verdes, naranja, zumo de naranja, langostinos y aceite de oliva virgen extra.
b) Alcachofa, cebolla roja, tomate, cilindro de queso fresco y bol de rúcula, con un poco de zumo de limón y aceite de olvida virgen extra.
Me quedo con la opción A. Mi favorita con pocos ingredientes es la ensalada de manzana, zanahoria cruda y piñones.
Suponog que no prepararás esa ensalada a menudo porque los piñones cuestan un riñón y parte del otro 😛
Mmm… piñones 🙂 Lástima que cuesten tan caros sino los comería a diario.
Me encantan las ensaladas y la verdad es que creo que cumplo todas las reglas de las que hablas en este post en la que preparo, así que me voy satisfecho después de haber leído esta entrada, sabiendo que al menos mis ensaladas son saludables 🙂
Sin duda me encantan las ensaladas, las como muy a menudo e intento prepararlas muy sanas.
Estaba dudando entre cual de las dos ensaladas escojer, pero al final pesaron los langostinos.
No obstante, el hígado necesita especial atención, así que lamentando el asunto de los langostinos, pero el hígado es primero.
Gracias por los consejos, algunos de ellos ya los pongo en práctica, pero otros, siendo honesto, hasta el día de hoy no tenía la menor idea de elllos.
Buenos consejos aunque yo me paso a veces con un poco de pollo rebozado en la ensalada…. Nunca había probado de poner espárragos verdes en la ensalada mmm qué buenos!