¿Quién no conoce el tomillo? Sobre el tomate está tan bueno… Pues bien, lo que probablemente desconoces es que en la antigua Grecia fue usado para curar heridas graves, mientras que en la Edad Media se usó contra los problemas respiratorios conocidos como asma y disnea.
A continuación puedes leer otros de los beneficios de esta planta aromática fácil de cultivar, tan utilizada en la cocina.
1. Gracias al timol, uno de los aceites esenciales que abundan en sus hojas, el tomillo es capaz de regular la función intestinal y facilitar la digestión de platos pesados. Además es antiséptico, de ahí que sea bueno para curar heridas.
2. Destaca también por su contenido en hierro, un mineral esencial para tu organismo que fortalece el sistema inmunológico, tonifica la piel, previene la anemia, la fatiga y la debilidad…
3. Regula los niveles de azúcar en sangre, así como la temperatura corporal. Lo hace gracias al magnesio que contiene.
4. También por éste último se considera el tomillo un aliado contra el estrés y el cansancio mental.
5. En su composición se encuentra el potasio junto al hierro y el magnesio, mineral que principalmente normaliza el ritmo cardíaco, ayuda a eliminar desechos orgánicos y a transportar oxígeno al cerebro.
6. Cuida de tus dientes y encías. Combate además el mal aliento y es capaz de curar llagas, herpes…
7. ¿Otra cualidad del tomillo? Regula el ciclo menstrual.
8. Es ideal para acabar con los gases intestinales.
9. Posee también diferentes vitaminas como el retinol o vitamina A, necesaria para el crecimiento y desarrollo de huesos y células, popular por contribuir a mejorar la visión nocturna y prevenir problemas visuales como el glaucoma o las cataratas.
10. ¡Este tal vez ya lo conoces! Es muy eficaz en el tratamiento del resfriado común.