Rojo, rosado o amarillo, el pomelo o toronja sabe de maravilla en diferentes ensaladas. Su zumo mezclado con piñones y miel es una estupenda vinagreta, ¿te animas a conocer algunas de sus virtudes?

1. Gracias a la vitamina A que contiene, esta fruta de sabor ácido ayuda a mantener el bienestar de las células mucosas que recubren las vías respiratorias y el tracto digestivo.

2. Al igual que la naranja, ayuda a curar con mayor rapidez el resfriado y la gripe.

3. Te ayuda a perder peso disminuyendo la retención de líquidos y actuando como laxante. Al margen de saciar como pocas frutas, al ser agua en un 90%.

4. Reduce el colesterol malo y los triglicéridos, protegiendo tu corazón.

5. Su consumo mantiene bajo control los niveles de azúcar en sangre.

6. Junto al ajo, la remolacha y la zanahoria, entre otros alimentos, el pomelo contribuye a la desintoxicación del hígado.

7. También es bueno para la piel; estimula la producción de colágeno, ayuda a eliminar manchas oscuras, mejora el eccema, el acné, la psoriasis…

8. Es rico en potasio, por lo que también desempeña funciones como transportar oxígeno al cerebro, normalizar el ritmo cardíaco, regular la presión arterial y combatir la fatiga.

9. Es por ello ideal para todo deportista, que ha de tenerlo en cuenta para reponer minerales y líquido perdidos en la actividad física, minimizar el riesgo de lesiones, potenciar las defensas…

10. También debería contar con él toda mujer embarazada, dado el ácido fólico que contiene. Claro que por su composición ácida, puede ocasionar acidez a aquellas gestantes con el estómago delicado.

Como ves no le faltan beneficios, ahora bien, también debes saber que su consumo puede ser peligroso si se mezcla con determinados medicamentos.

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